Sábado, 7 de febrero de 2015. Son las diez de la noche. En la taquilla de La Resi se comienzan a repartir (a quien todavía no las hubiera comprado los días anteriores) entradas de la, ahora hace quince años, extinta sala Arena Auditorium de Valencia, otra vez instándonos a una más de esas noches en las que volveríamos a tirar abajo La Residencia, en un concierto que organizaba el nuevo sello valenciano UPSY, ese día contando con la ayuda de los recién estrenados Mental Signals, Tercer Sol y Ghost Car, grupo invitado por el sello anteriormente nombrado.
A las diez y media comenzaban Mental Signals, trío valenciano de jóvenes muchachos que daban bajo este nombre su primer concierto tras haber grabado el pasado verano de 2014 tres temas a modo de maqueta y presentación del grupo. Su concierto comenzaba con ritmos lentos pero bien afianzados, con una buena base sobre la que se apoyaban esta vez guitarra y bajo, introduciendo más tarde una voz que se ajustaba perfectamente a las melodías de aquellos punteos de guitarra y también a la profundidad musical del grupo. Mientras avanzaban se podían observar todos los matices e influencias de las que estos chicos beben para crear su sonido, desde el neo-folk de Death In June, las líneas de bajo de Joy Division hasta los sonidos más accesibles de la época early-ninetys de The Smashing Pumpkins o algunas progresiones acordes cercanas a sus colegas Acapvlco. Un concierto totalmente recomendable para disfrutarlo tranquilamente y sumergirte en toda su atmósfera.
Tras un pequeño descanso llegaba el primer golpe sobre la mesa de la noche. No es de extrañar que Tercer Sol sean una de las últimas revelaciones de la música valenciana, ya que sus componentes vienen de bandas ya de sobras conocidas como Siesta! o Wind Atlas. De esta manera facturaron a finales del año pasado el EP «Tercer Sol» (Flexidiscos / Boston Pizza Records, 2014), psicodelia oscura, con un rollazo a héroes del pasado como J.Spaceman y Peter Kember.
Siendo este el concierto en La Residencia los Tercer Sol venían a por todas, demostrándolo desde el primer segundo, en cuanto comenzaron a tocar los primeros temas cavaron un hoyo muy tocho para seguir haciendo toda la música posible para cavar hoyos (en un mash-up Bart Simpson VS. Spacemen 3), y nos metieron a todos dentro de él, bailando aquellas notas de bajo repetitivas a modo de mantra, que te absorben, voces a tope de reverb+delay, y con una guitarra que te vuela la cabeza del sitio en cuanto avanzan los primeros acordes de «Cueva«, el tercer tema de su grabación, lo más bestia de este palo en Valencia desde que vinieron a tocar los Celica XX al Magazine en junio. Seguíamos en la brecha mientras se sucedía todo aquel recital de ruido y efectos desde los amplis de estos cuatro hombres que nos hicieron reventarlo todo en un head-banging digno de las eras de melenudos bañados en cerveza sin cesar en ningún momento los empujones y los saltos entre los presentes, mientras en el escenario se seguían las nuevas canciones del grupo, a seguir en la recta final del concierto por los otros dos cortes que completan su EP, «Melange» y «Nuevo Amanecer», preparando con esto el terreno para su último estallido, «Último Grito» (tema exclusivo incluído en el recopilatorio Conjunto Vacío #2), con el que ponían el broche final, bajo pedales y sintetizadores que creaban todo el sonido necesario para completar la perfecta base que ofrecen bajo y batería, en completa sincronía y con un sonido muy compacto, a un concierto excelente en todos los aspectos y en el que se dio todo lo posible.
Turno entonces para las londinenses (mitad españolas y mitad inglesas) Ghost Car, que venían desde allí a presentar sus primeras canciones, que están contenidas en el LP split con la también girl-band valenciana Summerisle, publicado bajo el mismo título «Ghost Car / Summerisle» (UPSY / Flexidiscos, 2015), en un concierto que prometía tanto que acabó por ser un desembarco triunfal en la tierra por excelencia de la música underground española.
Comenzaban con «Woman In The Shadows», tema que ya sonó el mes pasado en Capitán Demo de Radio 3 y que muestra los principales ecos post punk de The Sound y demás, y que pese a su corto recorrido (menos de un año llevan tocando estas chicas, y dos de ellas sin experiencia previa) entregan un sonido muy potente, que en este caso hizo desatar la locura general entre las primeras filas donde se cantaba sin parar entre pogos y gente volando por encima del público cual stage diving de Iggy Pop, a quien podíamos identificar (musicalmente) en uno de los siguientes temas, «Rocket», que no está todavía incluido en ninguna grabación, en lo que viene siendo un comienzo relajado para pasar de un golpe a un ritmo rápido con guitarras distorsionadas y un órgano que aporta el toque setentero. El concierto seguiría con «Be A Better Lady», dando otro golpe de efecto (a juzgar por la sensación el golpe lo dieron en el suelo, porque salimos todos de un bote hacia arriba) para continuar con «Just Like Honey» «No Love For Me» en lo que se preveía como una canción más tranquila pero que acabaría por sacar el lado más punk de las chicas, subiendo a tope la distorsión y con un juego de voces entre sus vocalistas principales perfectamente sincronizado, y también del público, en una lucha por no caer rodando entre vasos llenos sobre la alfombra del escenario una vez más, que no todos ganarían, dando por terminado el concierto, no sin sacarse antes un bis improvisado de «Woman In The Shadows» (ya que todavía no tienen más canciones preparadas) en el que ya se nos agotaron las pilas, bailando como si fuese el fin del mundo, pasando un micrófono entre la gente para que fuera cantando quien lo pillara y llevando por encima del público a la guitarrista de Ghost Car en pleno acto de servicio mientras algunos rezaban para que su cable no se quedara corto.
En definitiva otra noche increíble en La Residencia, solamente nos queda agradecer a UPSY por montar toda la parafernalia y llevarlo genial, a los tres grupos por el musicote que ofrecieron y a La Resi por estar ahí siempre, y a vosotros animaros a seguir a toda esta gente que acabo de nombrar bien de cerca, ¡seguro que os sorprenden!
Hervir un Indie 