Vienen a ser muchas las grandes bandas que uno puede encontrar si mete las narices de lleno en el underground nacional de estos últimos años, una gran tanda de buena música, donde encontramos calidad y lo más importante, diversidad. Sin irnos más lejos, en la escena garagera de Madrid nos encontramos a Los Nastys, cinco tíos que a la hora de grabar su primer EP han buscado la perfección para ofrecer el sonido más sucio y lo-fi, “Me Lo Encontré Así” (Tres Cipreses, 2014) es el nombre de este disco tan salvaje, escucharlo ha sido como inyectarse una dosis de punk ruidoso directo en vena.
Una de las joyas que encontramos por su bandcamp es la siguiente frase (las canciones luego, tranquilidad señores): “A las páginas web les mola mucho copiar nuestra biografía para describirnos”. Esto ya demuestra que a priori Los Nastys se definen en dos cosas: actitud y verdades como puños (que no se ofendan otros medios, pero las cosas como son).
Cinco temas repletos de letras ácidas y llenas de ironía que buscan ser una prensa para la sociedad actual, lo que pasa y lo que ocurre a pie de calle, lo dicho, la pura/dura realidad. Aunque para realidad la que encontramos en su single Madrid Es Un Cementerio, toda una declaración de intenciones que destapa las cosas que últimamente se están cargando de Madrid, las cosas que se están viniendo abajo y desapareciendo: Vivo en Madrid, vivo en un cementerio… Mi chupa es pequeña y no tengo más remedio… Ya no hay droga buena para tomar… Ya no quedan ídolos para matar… El resto ya va pensado a gusto de consumidor.
A destacar también el primer videoclip que se grabó para este tema, llevado a cabo por Carleone Films y Mapache Producciones. Colores, sombras y personajes estereotipados que son cazados por ese ente de tan exótica máscara, una representación acertada para un miedo orgánico, del que no se encuentra en el cine de terror más convencional. Muy intercaladas a su vez estas escenas con algún que otro plano de guitarras, bajos y baterías totalmente fuera de control, todo un cóctel de sensaciones adulteradas .
El garage y el lo-fi se encuentran bien marcados en cada tema del disco; canciones cortas y repletas de guitarras aceleradas y endiabladas, todas ellas acompañadas de unas voces aulladoras y llenas de éxtasis, que gimen e interpretan cada verdad (perdón, frase). Así cesa el sonido al final del propio single, tosiendo ante el micrófono las últimas fuerzas que restan, auténtico.
Cambios repentinos de ritmo a mitad de canción con arpegios de guitarra que llevan aires del rock más clásico, ese es Me Lo Encontré Así, tema que da nombre al EP. Algo trastocado le deja a uno el falsete y el sonido psicodélico de trasfondo con el que comienza Okinawa Olvídate de Mí… Pero está claro que hay que escuchar el tema entero antes de juzgarlo, vale la pena esperar a más guitarras mientras se escucha un bostezo al cantar: Ya no hay sitio para mí… Justo ahí aparecen chillidos y fuertes guitarras, junto a las voces más rabiosas de todo el disco: No sé qué pasa con la gente de hoy! Yo sólo pienso en tocarte las tetas!… Ganando protagonismo, el riff electrizante que surge entre berridos culmina el tema con una aguda distorsión que se marcha por la esquina.
Por otro lado tenemos a Holograma y Policía de L..A., dos temas que perfectamente ocuparían el papel de single si se diera el caso, sin ninguna duda son dos canciones que definen a la perfección ese estilo de Los Nastys que deambula entre el punk rock y el power pop más garagero y rompesuelas. Al loro con estos chavales y a seguirles la pista, ¡nosotros ya tenemos ganas de encontrarlos tocando por algún antro! Porque ya sabemos de sobra que el garage como más se disfruta es en directo.